¿Sabes qué son las persianas alicantinas y cómo utilizarlas?

Persianas alicantinas de exterior en pérgola junto a la piscina

Un poco de historia...

Como su propio nombre nos lo indica, las persianas alicantinas fueron inventadas en Alicante, como una sencilla solución frente al calor y los insectos en verano.   Son perfectas para colocar en cualquier estancia.

Están formadas por lamas de madera o PVC dispuestas en sentido horizontal y unidas entre sí mediante ganchos galvanizados, que se enrollan mediante un sistema de polea con cuerda.   El accionamiento es mediante una cuerda situada en el centro de la misma, que la recorre de arriba a abajo y que la hace subir y bajar.

Así, por sus características, las persianas alicantinas son una solución intermedia entre las persianas venecianas y los estores enrollables: con las persianas venecianas, tienen en común la forma y las lamas, mientras que con los estores, el sistema de enrollado y de recogida.   Para recoger la persiana, la cuerda se fija en la parte de arriba con un simple nudo a la altura deseada, o fijándola a un lateral.

Estamos acostumbrados a verlas, principalmente, en casas de campo, en zonas rurales, o en zonas urbanas colgando en terrazas y balcones del sur del país o en zonas de calor intenso en verano.   También se utilizan para crear ambientes decorativos naturales y rústicos, al mismo tiempo que protegen el interior frente a los rayos del sol.

Aunque últimamente despiertan entre los diseñadores y arquitectos deseos de reivindicación, y éstos las están sacando de su concepto rústico, convirtiéndolas en elementos de uniformidad urbana y empresarial del ocio.  Y por su adaptabilidad a todo lo vintage y su aspecto artesanal y sostenible, las posibilidades decorativas son infinitas.

Si ya te has convencido, y deseas comprar una persiana alicantina a medida, puedes hacerlo directamente desde casa a través internet, como en esta tienda online.  Pero si aún no, continúa leyendo!!!

¿Qué ventajas tiene instalar persianas alicantinas?

Para empezar, se trata de un modelo de persiana que encaja en cualquier ambiente y estilo decorativo.   Además de los motivos más estéticos, aquí tienes otras de sus ventajas:

• Actúan como un buen aislante frente a la luz y al calor.
• Evitan la entrada de molestos insectos, sobre todo en los meses de verano.
• Proyectan sombra en puertas y ventanas.
• Dejan pasar el aire.
• Son resistentes a todo tipo de inclemencias meteorológicas como lluvia y viento. Perfectas para poder colocarlas en el exterior.
• Son muy fáciles de instalar, tanto en el techo como en la pared, y bastará con colgar la persiana de una alcayata o gancho galvanizado.
• Son económicas y suponen una inversión a largo plazo, ya que son muy duraderas.
• Son muy fáciles de limpiar, y mucho más con los nuevos materiales de fabricación.
• Se pueden comprar a medida, consiguiendo así que queden perfectamente ajustadas al tamaño de la ventana o la puerta.
• Aportan un aspecto diferente a balcones y terrazas.
• Son decorativas: incluso en su versión más básica, en madera, la vistosidad de las persianas alicantinas no se discute.

Con una multitud de variantes que ofrece poder elegir el tono de color preferido, las opciones de apariencia que admiten (como cerezo, roble, pino, etc.) además de su funcionalidad, son perfectas para algún proyecto de diseño .

> Las alicantinas de madera

Corresponden a las persianas más auténticas y tradicionales.   

La madera aporta un frescor mucho más natural a la casa, ya que proporcionan un mayor aislamiento térmico, lo que se refleja en una temperatura mucho más agradable en el interior.  En cuanto el mantenimiento de la madera, no es necesario preocuparse: vienen con un tratamiento que las hace resistentes también al viento, la humedad, el calor y el frío. 

> Las persianas alicantinas de madera para exterior

Suelen estar elaboradas con madera de pino, por lo que son más pesadas que las persianas de plástico, lo que las hace más adecuadas para los lugares donde hace más viento, y como persianas alicantinas para exterior.   Otra ventaja de la madera es que se las puede pintar, y así podrías cambiar su color cuando tú quieras.

En el caso de las opciones de persianas alicantinas de madera de exterior, la pintura que recubre estas persianas es especial para exteriores.   De todos modos, podría alterarse con el paso del tiempo, aunque depende mucho de la intensidad de las condiciones ambientales.  Así, el barnizado podría desaparecer en condiciones adversas.   En estas circunstancias, con un sencillo tratamiento, como otro barnizado, estarían como nuevas.

> Alicantinas de PVC

Están hechas de PVC de primera calidad, que no se altera con el tiempo.   Se trata de un material muy ligero, ya que las lamas suelen estar huecas, por lo que las persianas acaban por pesar menos.  Esto las hace manejables, pero se convierte en un inconveniente en lugares donde hace mucho viento.

En contrapartida, su mantenimiento es mucho más sencillo: no se necesita ningún producto especial (como en el caso de la madera) ya que su apariencia no cambia debido a los agentes meteorológicos.  Además, para su limpieza, solo es necesario un paño con agua y jabón.

Y una ventaja adicional es que estas son más económicas que las de madera.   Comentar además que se pueden encontrar en diferentes colores y materiales.  Si quieres disfrutar del toque rústico que proporciona la madera, ahora también existen las alicantinas plásticas imitación de madera, entre las cuales también cuentas con diferentes posibilidades, como imitación de nogal, marfil, etc. También existe la posibilidad de imprimir alguna ilustración personalizada con las últimas tecnologías de estampación (serigrafía, vinilo adhesivo, impresión fotográfica…), permitiendo un amplio conjunto de posibilidades decorativas que muy pocos productos del hogar ofrecen.

¿Cómo funcionan las persianas alicantinas?

La entrada de la luz y el calor del exterior se regula en función de la subida y bajada de la persiana alicantina.   En la parte superior de la alicantina hay un listón donde va sujeto el mecanismo para poder subir y bajar la persiana.   Se trata de un cordón que recoge las lamas atravesando un orificio superior con una polea que puede ser de plástico o metal.

Al tirar de dicho cordón o cuerda se produce el enrollamiento de recogida sobre sí misma. La persiana se puede quedar a la altura deseada fijando la cuerda con un nudo o atando la cuerda a un lateral. También hay algunos modelos que cuentan con un freno de retención ubicado en la polea y que se acciona con un suave movimiento de la cuerda o cordón.

Entonces...  ¿ya te has decidido?  Si este post te ha servido de ayuda, déjanos un comentario o compártelo en redes sociales.