El poder estético de las molduras decorativas

La decoración con molduras decorativas vuelve a estar de moda.   Durante los últimos años, este tipo de ornamentación había desaparecido de las casas, para dar paso a estilos más minimalistas, con paredes y techos más rectos.  El minimalismo ornamental se había impuesto.

Sin embargo, actualmente parece que las molduras vuelven a conquistar el corazón de los interioristas, ¡y del público en general!.  Por lo que es común encontrar numerosas reformas integrales que incluyan estos detalles en sus techos y paredes.  Y es que, lejos de lo que se pueda pensar, las molduras son fáciles de instalar y también son bastante asequibles a cualquier presupuesto.

Las molduras decorativas y la decoración de interiores

Así que dependiendo de tu gusto y el tipo de decoración que tengas en casa, podrás elegir entre unas u otras.  Lo que es una realidad es que estas molduras quedan bien en cualquier rincón de la casa, desde pasillos, salones y comedores, hasta dormitorios y baños.

En cuanto a su colocación, lo cierto es que son fáciles de instalar.  Si eres manitas, puedes instalarlas tú mismo; o contar con la ayuda de un albañil.  Y si no eres muy hábil para que puedas instalarlas por tu cuenta, siempre puedes recurrir a las molduras decorativas autoadhesivas para pared o techo. ¡Más fácil imposible!

Las 9 tendencias en diseño de interiores con molduras decorativas:

1.    En forma de friso: divide las paredes en horizontal

Tener frisos a media altura era algo común en las casas señoriales de principios del siglo pasado, en donde vivían los señores, para combatir posibles problemas de humedad.    Hoy, este recurso se emplea como elemento decorativo con el único objetivo de potenciar una pared.

Una forma de usar estas molduras para paredes es la de dividirlas en dos.   Se suele colocar a 1,20 cm como medida estándar, y pueden ser de madera natural, laminados, lacados o revestidos de papel pintado,

Es uno de los recursos más usados, pues no recarga los espacios. Tan sólo se añade una línea de división entre la parte superior e inferior mediante una moldura sencilla.  Esta moldura divisoria hace que se marquen dos zonas, pudiendo reforzar esa sensación con diferentes colores, o añadiendo papel pintado en la parte superior o inferior.   Así que puedes dar rienda a tu imaginación: ¡dependerá del gusto de cada uno!

2.    Como boiserie: las molduras en cuarterones

No solamente verás molduras en techos: también se deslizan por las paredes aportándoles textura y volumen.  Corresponde a un recurso decorativo que deriva del Art Dèco.  Además de la escayola, también se suelen utilizar de madera o de materiales sintéticos, ligeros y fáciles de trabajar.

Si se colocan en forma de cuarterones, quedan muy elegantes y señoriales.   Puedes diseñarlos en forma de casetones, en los que puedes enmarcar cuadros, a modo de enormes paspartús; o si te apetece, dejarlos vacíos.  También suelen decorarse con papel pintado, quedando enmarcados por la moldura.

Cuando las molduras son de madera, se le denomina “BOISERIES”.  Corresponde a un revestimiento de madera que se aplica a paredes (y puertas), y que consigue no solo aportar estilo, sino darle un toque especial y muy elegante a estancias que, a priori, podían parecer sosas.  Se han convertido en un detalle decorativo muy chic.

3.     Para ganar en profundidad

Pues sí.  Revestir una pared con una boiserie consigue dar más profundidad, y por lo tanto más espacio visual a cualquier estancia, incluso en aquellos pasillos más estrechos.

Y si además pintas las boiseries haciendo juegos de color, ampliarás los límites de la estancia.   Para pintarlas, puedes usar solo un color, o combinar dos.   El juego de contrastes, al pintarlas de algún color diferente al resto de paredes, es enorme.  Sin lugar a duda, esta puede ser una manera de dejar atrás su imagen más clásica, y adaptarlas a estos nuevos tiempos.

4.    Para ganar en estilo

Las molduras para techos vuelven a ser también toda una tendencia.  Crean ambientes más señoriales y aporta un poco de dinamismo en las casas en la que la decoración es sencilla.  Podrás conseguir así techos mucho más especiales y personales.

Las opciones son muchísimas. Además, siempre puedes combinarlas con un rosetón en la parte en la que se colocan las lámparas, algo que también dará carácter, y conseguirás unos techos menos aburridos.

5.    Para tener techos con más glamour

En habitaciones con techos muy altos, siempre es conveniente colocar molduras de mayor tamaño, ya que las molduras pequeñas quedarán perdidas.  En estos casos también conviene utilizar modelos ascendentes, es decir, con más elementos ornamentales en la parte superior.  También son especialmente recomendadas para los vanos en forma de arco de puerta y ventanas antiguas y clásicas.

6.    Para delimitar: coloca una hilera de pequeñas ménsulas

¿Por qué no colocar una serie de molduras como ménsulas en el techo, al hacer tu próxima reforma?  ¡Enhorabuena porque, además de ser tendencia, le darán mucho nivel a tu casa!  Una hilera de pequeñas ménsulas te permitirá recorrer perimetralmente el techo para delimitar diferentes zonas y espacios, como la zona de comedor o su separación del salón.

7.    Combínala con la iluminación: para las luces indirectas y cables

Las molduras, además, pueden ser estupendas para ocultar luces tras ellas.   Son perfectas para colocar unas luces indirectas, y lograr crear espacios mucho más cálidos.   Asimismo, las molduras también pueden ayudar a ocultar el cableado cuando reformamos una vivienda.   Son una alternativa perfecta cuando es necesario bajar el nivel del techo y así esconder todas las instalaciones nuevas.

8.    Para resaltar

Puedes jugar con las molduras para crear diferentes efectos decorativos sobre las paredes para obtener otros efectos y usos diferentes de las molduras. Por ejemplo, puedes usarlas para resaltar: enmarcar puertas y ventanas, enmarcar cuadros, enmarcar chimeneas, etc.

9.    Para jugar con el diseño: rosetones o plafones

Los rosetones de escayola se utilizaron durante muchos años en los techos.  Normalmente, de ellos descendía una lámpara de araña, dando lugar así a una decoración clásica.

Si bien es posible dar estilo y clase a tu salón colocando un plafón para una lámpara central, la propuesta de hoy es diferente: se trata de utilizar los rosetones sobre las paredes, creando un mural con ellos.  Puedes crear tu diseño y tu composición propia con diferentes dibujos y tamaños de rosetones.

¿Qué opinas ahora sobre las molduras decorativas para techos y paredes?   ¿Sigues pensando aún que no son para ti?  Nos encantaría leer vuestras opiniones. Así que no dejéis de escribirnos .  ¡Y muchas gracias por seguirnos!